A través de diferentes técnicas, como la terapia regresiva, hipnosis, visualizaciones, terapia humanista, Gestalt, Análisis Transaccional, terapia energética, PNL y constelaciones familiares y la visión sistémica que esta me aporta te acompaño en que empieces a mirar tu vida con otra mirada, una mirada desde el corazón, te ayudo a identificar todo aquello que has hecho en tu vida por inercia o, lo que es lo mismo, guiado ciegamente por tus creencias y te acompaño a que despiertes a tu vida y hacerte presente y protagonista consciente de ella.
Gracias a esta formación la visión sistémica se cuela en cada sesión de una u otra forma, a través de como las creencias familiares, y las vivencias de nuestros ancestros nos condicionan de una manera consciente o inconsciente. Con una base científica, la epigenética nos habla de como las vivencias de nuestros antepasados nos influyen en nuestra vida.
Al igual que llevamos las memorias de nuestros antepasados llevamos también las nuestras propias pero no hay únicamente las memorias mentales sino que hay un tipo de memoria que se llama memoria celular o corporal que esta más profundamente arraigada en nosotros, la terapia regresiva te lleva a conectar, resignificar y sanar esas memorias que no nos dejan avanzar. “ pero si eso paso hace muchos años” da igual si no esta procesado internamente da igual que haya pasado hace 20 años o ayer, las heridas emocionales no conocen la línea de tiempo, si hay un dolor emocional desde hace tiempo si no lo he superado esta presente.
Transaccional, este marco nos da una mirada más teórica pero muy gráfica, que nos ayuda a entender los diferentes tipos de diálogos internos que nos condiciona y como y desde donde nos comunicamos con los demás, así como los juegos dañinos a los que nos enganchamos con los otros, y nos deja ver otro tipo de respuesta.
Dentro de la terapia humanista, la Gestalt nos da el enfoque emocional/corporal y nos lleva a mirar la emoción que hay detrás de cada “personaje” que nos conforma y poder dar voz y espacio y entendimiento a cada parte de nosotros, y romper con las incoherencias internas que nos desequilibran internamente. Por ejemplo yo puedo querer hablar con alguien pero la vergüenza no me deja, yo quisiera estudiar artes pero toda mi familia son abogados y me siento obligado a ello. El entender todas las “opiniones” que están dentro de mi, hace que realmente rompa con las emociones y creencias limitantes y de fuerza a lo que realmente quiero.
Gestalt, dentro de la terapia humanista, la Gestalt nos da el enfoque emocional/corporal y nos lleva a mirar la emoción que hay detrás de cada “personaje” que nos conforma y poder dar voz y espacio y entendimiento a cda parte de nosotros, y romper con las incoherencias internas que nos desequilibran internamente. Por ejemplo yo puedo querer hablar con alguien pero la vergüenza no me deja, yo quisiera estudiar artes pero toda mi familia son abogados y me siento obligado a ello. El entender todas las “opiniones” que están dentro de mi, hace que realmente rompa con las emociones y creencias limitantes y de fuerza a lo que realmente quiero.
Esta técnica también es algo que he ido desarrollando como la unión de las técnicas anteriores, terapia regresiva, Gestalt y las Constelaciones, a través de ella llegamos a comprensiones profundas a través de conectar de una manera más auténtica contigo mismo y poder entender situaciones familiares, laborales, relacionales, y personales. Siempre que se trabaja desde este estado de conciencia te permite ver tu realidad y tu vivencia con más foco y claridad y desde ahí puedes tomar mejores decisiones desde un estado más equilibrado. La sensación generalizada tras este ejercicio es de bienestar, confianza interior y claridad.
Soy de la idea de que todo tiene un porqué y un para qué, y siempre hay que hacer una mirada más trascendental para poder sacar el aprendizaje y la fuerza de la experiencia que estoy viviendo en mi vida. A la vida no hemos venimos a sufrir pero a veces aprendemos desde ahí, el trabajo personal, el conocerte mejor y el tener un entendimiento más profundo de ti mismo, de los otros y de las situaciones que vives, te llevará a tomar las riendas de tu vida, enfocar tu vida, y aprender las lecciones que cada vivencia encierra. Deja de sobrevivir y empieza a vivir y a disfrutar de tu vida.